It´s no Good...

Día X de semana de vacaciones. Las 4:31pm y el calor comienza a joder. ¿Regresar a la computadora y andar en la tan entretenida red de los perfiles , blogs y videos de musiquita relajante? No. ¿Comenzar la tarea de vacaciones? ¿Hola? ¿Tarea? ¿Alguien menciono tarea?

¿Qué sucede si Cyn enciende ese aparato que ocupa un lugar en el mueble, mueble que ocupa el mayor espacio en la sala de la casa? Sí su nombre: Sr Televisor. (o TV para darle más cache al asunto).
Click, y la señal comienza a ejercer su labor. Comienza la sintonía. Me recuesto y me preparo para entretenerme (recuerdo que de niña, pasaba horas tras el aparato en mención).
¡Buscando diversión!... pasan minutos y sigo sin encontrar algo… Comienzo a sacar conclusiones, mismas que me recordaron el por que he abandonado esa actividad:
Uuuy! La pobrecita TV nacional. Cada día parece limitar más sus costos a lo indispensable. Se nota que produce en sus estudios programas de baja inversión: Recorta la ficción y se nutre más de series importadas. ¿Y qué puedo decir de la internacional? Despide personal, recicla sus productos, coproduce y afianza su mercadeo global para sobrevivir. Ahaha o al menos eso me insta a pensar. Mejor seguiré cambiando el canal.
…sigo cambiándole, y por más numeritos llamados canales que avanzo me encuentro lo mismo: Las fronteras entre la TV privada y la pública se desdibujan, tanto en los contenidos, como en la manera de financiar su labor. Se opta por el mercado, el puto consumismo y la tan seguida banalidad. Los géneros se transforman en formatos híbridos que responden a necesidades de venta, y ya hace un rato, (o mejor dicho ratote) se olvidaron de las necesidades expresivas. Ahahah. Las mimas películas que repiten cada fin de semana y las mismas películas que repiten cada cierto periodo vacacional ( ¿Quién no se ha dado cuenta de que Titanic y los filmes religiosos se llevan el subrayado?), los mismos personajes, los mismos programas que según regalan dinero, noticieros que solo evidencian pormenores de pánico y estancamiento moral, y que chaitochaitomuamuaja.
¿Y si regreso a canales públicos, que son los mas accesibles para los televidentes nacionales? La TV pública extravía sus objetivos, se le da por competir con la privada, en busca de una audiencia masiva para lo cual degrada sus contenidos. Pero esperen creo que podemos rescatar el canal 22 (:.
¡Uyy! y más uyy: Las erráticas políticas gubernamentales hacen ya intolerable la sintonía del amigo canal 22, que a lo largo de una serie, interrumpe cada cinco u ocho minutos para insertar los Spots del IFE, de la lotería nacional, y de “para vivir mejor”. Chale, mejor sigamos cambiando, dice mi abuela que el que busca encuentra :P.
¡Hey! ¡La última alternativa!: El amigo canal Once, y es que ¿Quién no recuerda al inspector truquini con sus miles de misterios por resolver, o a esos hipopotamitos bien la banda que vivían en aquel valle lejano, sí, atinaste! Los mommin. Recuerdo como me entretenía el canal Once. Regresemos a los canales de TV pública y busquemos un número llamado Once: Miro por un lapso de quince minutos. Ahaha ahora nos endilga series extranjeras que ya hemos visto antes en TV de paga, y toda la propaganda que puede caber en sus horas de transmisión. Lastima por el amigo canal Once, cada vez se parece más a los pequeños canales de los estados, donde se la pasan alabando al gobernador en turno. ):
Chale ya son las 5:45. Y nomás no encontré nada. Mejor saldré en busca de diversión.